La comunicación permanente es una de las claves de la transformación de las organizaciones. Lo acredita la última encuesta de la consultora McKinsey&Company que ha difundido el Club Excelencia en Gestión, asociación empresarial dedicada a la mejora de la gestión y de los resultados corporativos.

Los resultados dicen que la transformación es necesaria pero muy pocos ejecutivos (un 26%) reconocen el éxito de los cambios en sus empresas. ¿Y los consultados que proponen para abordar satisfactoriamente el reto? Un 44% cree que tiene que ser más ágil para neutralizar las personas resistentes al cambio y un porcentaje similar que dedicaría más tiempo desarrollando y comunicando una historia de cambio, mejorando la transparencia y la implicación de las personas con la ayuda del relato. Y es en este punto donde la gestión estratégica de la comunicación corporativa es la clave como herramienta de transformación.

Comunicar quién somos, qué hacemos, para quién y para qué. El liderazgo se adquiere destacando constantemente el progreso y el éxito de la gestión a los empleados y a los clientes. La comunicación interna y la externa se dan la mano para convertir la transformación en la hoja de ruta de la organización.